La semana termina con la eclosión del dolor de muela hoy a las seis de la mañana, esperar media hora el taxi mientras tormentaba para venir a lo de mis viejos a buscar un sinálgico, y en el viaje darme cuenta de que tengo que ir a la guardia, que es urgente, que ya no creo que sea la muela de juicio porque el dolor se volvió demasiado puntual y demasiado adelante.
Soy miedosa. En el taxi iba llorando. Predecir lo que efectivamente sucedió, sólo me angustiaba. Igual, lloraba por todo. Por ejemplo, yo, que no suelo tener problema con ninguno de mis ex, ayer, me enteré de que una de las chicas con las que sale mi ex equis es rubia y bien fea, lo cual por un lado me hizo sentir mejor, y por otro pienso qué desilusión o si me cambian por lo primero que aparece, una rubia rulosa fea (porque eso de que las rubias son todas lindas es un mito, las hay lindas, pero las hay feas, como todo) que vaticino ni siquiera debe ser muy interesante. Ok. Herida narcisista. Tengo odio encima. Un odio que no quiero tener más. Un dolor que ya no debería doler, porque pasó mucho tiempo, porque no quiero nada, porque no me interesa. Porque pasé y puedo pasar otras cosas hermosas en la sabanita suave. No sé. Quizá, después de todo esto, ya no me quiera nadie.
Entonces llego a la guardia con mi madre, y sí, tratamiento de conducto, ya. Si me dejan pensar quizá ni vuelvo así que me quedé y por suerte me atendió una médica divina que no dejaba de reirse por lo aparato que soy y que terminó felicitándome por portarme bien. Semejante grandulona.
No mucho más. Tengo que estudiar. Estoy agotada. Estoy horrible, cara pálida e hinchada y para colmo me pesé en la farmacia y tengo un kilo y medio más de lo que pensaba. Tengo que estudiar. Después irme a Mar del Plata. Rogar que no se me parta la muela (cuando vuelvas te tenés que poner una corona porque si mordés algo fuerte se te puede romper el diente) e intentar hacer delete en esta semana que por fin ya termina y de la cual sólo rescato un momento, un encuentro de paz (you know...).
Buen fin de semana.
LM
...viene a mojarse los pies a la luna...