Mi relación con los premios es siemprecerca-nuncapremiada menos por un segundo premio a un guión el año pasado. Es algo semejante a mis notas, alumnaocho-nuncadiez, con varios nueves por ahí.
Ayer, por estar cerca, fui a la entrega de premios de Telefé Cortos. Con el corto no quedamos ni entre los diez pero sí entre los cincuenta, y eso, entre seiscientos setenta participantes, está bastante bien, y mejor todavía si consideramos que hace unos meses nos llamaron de parte del "jurado" para preguntarnos si ya lo habíamos proyectado en algún lado, porque en verdad no se podía participar si ya había sido mostrado o seleccionado en algún festival. Y bueno, dijimos la verdad a medias... un tímido "lo proyectaron en el Rojas", y mentimos todas las demás: Mar del Plata, Ciudad Abierta, etc, etc, etc.
Cuestión que ayer fuimos varios del equipo a la entrega de Telefé Cortos. Cita a las siete en el Teatro Coliseo. Llegamos a las seis, entramos a las siete, empieza a las ocho y dura hasta las nueve. Ordenado Telefé. Axel Kuschevatzky todo acartonado dice cuánto admira a todos los realizadores jóvenes que estamos allí y qué buena calidad los cortos de todo el concurso. Bueh. Presentes los jetones del gobierno José Nun, Gustavo López (los Gustavo López que rondan por ahí son tantos y en tantos rubros diversos que se merecen un post aparte) y Telerman. Me perdí de escuchar si cuando presentaron a Telerman dijeron Jefe de Gobierno o no. Supongo que sí, pero no lo escuché. Estaban los del jurado, Walter Salles en video desde L.A (va a filmar una adaptación de On the Road!) y el querido Villarroel. El evento era "La gran gala de Telefé Cortos", o sea como Operación Triunfo pero para chicos cool. Hay que captar a toda la gama, desde la grasa de las chicas que cantan boleros queriendo ser Mariah Carey hasta los chicos de bolso cruzado que frecuentan Palermo y sueñan en ocho, dieciseis, o treinta y cinco milímetros.
Telefé Cortos no es reality pero adopta los tips. Kuschevatzky mira a la cámara y le pregunta al espectador "¿cuál es tu ganador?", mira a la platea y dice escuchar el temblar de las rodillas, juega con el mismo suspenso y luego de entregar el tercer premio dice "quedan nueve cortos". Villarroel pasa a decir unas palabras y confiesa que "me siento como un nominado", y a esta altura no entendemos si lo dice por Gran Hermano o por los Premios Oscar. El corto ganador es muy bueno. Hecho especialmente para el concurso, incluye en su historia todas las acepciones y usos que puede tomar la palabra cambio. Una buena idea, un buen recurso, una historia cómica y buenas actuaciones. Premio merecido. Supongo que se verá en la emisión del domingo. Se llama CAM 810.
El reality habla de alguien que está ahí y que es alguien como uno. En Telefé Cortos hablan de "los chicos", "la emoción de las familias", "los grupos de amigos", y nosotros nos contagiamos y también queremos subir abrazados a llorar al escenario. Pero no. Somos chicosocho-nuncadiez y sólo miramos desde la platea todo el espectáculo "cultural" que el domingo, noséaquéhora, se verá en telefé cuando disfrace su caja boba de caja progresista.
...viene a mojarse los pies a la luna...